A mi madre le encantaba disfrazarse. Cuanto disfrutaba contándome
las fiestas que hacían y como siempre le gustaba ir original. Mirando las
fotos, la temática no ha cambiado tanto: vaqueros, romanos, vikingos, la bruja.
Ella era el espantapájaros del Mago de Oz. No puede ser más sencillo: camisa de hombre XXL, paja
saliendo de las mangas, en la cabeza una cesta de mimbre y un bastón con latas
colgando.
En
cambio, a mí no me gustaba nada (y aún me cuesta, para que voy a negarlo). ¡Me
daba tanta vergüenza!. El único recuerdo que tengo es el disfraz de japonesa que me hizo mi abuela. Pero claro,
ella cosía de maravilla y con unos retales y mucha gracia me hizo un vestido
precioso, con un montón de flores bordadas en la espalda, un cinturón de papel
pinocho, las sandalias forradas del mismo papel y en la cabeza un moño de esos
falsos que tenía mi madre. Y lo mejor, es que gané el concurso de disfraces de
la urbanización y tuve que salir a buscar el premio. Creo que es por eso que ya
no me volví a disfrazar más.
Ahora en
mi casa, lo de disfrazarse es cosa de todo el año. Tenemos un cajón especial en
la habitación de la peque, que es la delicia de sus amigas cuando vienen a
jugar. Tienen un poco de todo: disfraces comprados, pero también telas sueltas,
cinturones “vintage”, gafas de los 70, toda la bisutería que hemos acumulado, y
sobre todo, pinturas(pero, como les gusta pintarse). Sé que, en algún momento
de la tarde, aparecerán por el pasillo, perros, piratas, princesas y músicos
salidos de algún país lejano.
En el 2012, siguiendo la estela
de la abuela Juliana, mi tía le hizo a la peque para el Carnaval del cole, un
disfraz impresionante en un pis pas. El tema eran las Olimpiadas del 92 y para
nosotras, uno de los símbolos más especiales fue Cobi. En Servei Estacion encontramos
la tela ideal y, siguiendo el modelo que nos había hecho "nuestra diseñadora
favorita", fuimos con nuestro estilo "prueba, clava agujas, cose,
descose" añadiéndole algún detalle. Estaba tan graciosa.
Y
como por la noche, teníamos una fiesta de disfraces, (y soy de las
que me encanta tenerlo todo planificado, ejem), llenamos el estudio de
globos, relleno de almohadas (aquí no se tira nada), cartones, mucho celo y
pinturas, y en un día hicimos el disfraz de la Nube y el Rayo. Se nota que yo
no se coser, no?. Claro, para el mío, ya no me daba tiempo, así que
iba de "la mujer a la que le cae un rayo" con ropa chamuscada y
un paraguas roto.
Encontré
la idea en Oh Happy Day,una de esos blogs en los
que puedes perderte durante días y con ideas totalmente realizables. Yo
tengo pendiente el disfraz de caracol, que me encanta!
Este
año, el tema en el cole son "las épocas históricas" y me hace especial ilusión porque (aunque es secreto, pss!!) la peque va a
ir de Mosquetera, con un disfraz que hizo mi abuela hace ya más de 30 años con
... la funda de la televisión (aquello si que era reciclaje).
Y, es
que ya se sabe lo importante es ... la ACTITUD!!
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